El jueves pasado se estrenó en el país “The Hunger Games”. Esta película llevaba tiempo haciendo noticias y era una de las películas más esperadas del 2012 y por esto sentí interés por ir a verla. The Hunger Games es basada en el primer libro de una saga de 3 libros escritos por Suzanne Collins. La historia se basa en un futuro donde las personas mueren de hambre tienen que luchar y cazar por conseguir comida. Luego de una guerra entre el gobierno y los cuidadanos, el gobierno decide castisgar a estos por haberse rebelado y crea los Hunger Games donde eligen 2 personas de cada uno de los 12 distritos, una hembra y un varón, entre 12 y 18 años para servir como tributo y participar en los juegos. Estos juegos son bien simples, los encierra en una especie de bosque controlado virtualmente, y solo de los 24 participantes puede salir con vida.

El personaje principal, Katniss Everdeen interpretado por Jennifer Lawrence, se ofrece como voluntaria a participar para evitar que su hermana sea parte del tributo. Ella y Peeta Mellark, el segundo tributo del distrito quien es interpretado por Josh Hutcherson, viajan a la ciudad donde se llevarán a cabo los juegos. Para no dar spoilers, porque aquí es donde se pone bueno, la película es mucho mejor de lo que pensé que sería. No he leído ninguno de los libros y no sabía qué esperar, quizás eso ayudó a que no tuviera expectativas.

Todo el vestuario parece haber sido sacado del closet de Lady Gaga, lo cual fue raro pero para nada malo. Todos los actores, incluyendo a Lenny Kravitz, hicieron un excelente trabajo con su actuación. El único que quizás no me volvió loca fue Josh Hutcherson, pero aún así lo hizo bien. Los efectos y sonidos, por igual, fueron muy buenos y se veía todo bastante real.

Lo único que noté que estuvo un poco forzado fue la historia de “amor”, de la cual no voy a decir mucho para no dar spoilers, pero sentí que fue todo mentira solo para formar parte de lo que estaba sucediendo, pero no parecía ser real ni que los personajes estuvieran realmente enamorados.

Para no decir más, las 2 horas y media que tiene esta película de duración valen la pena. No he leído los libros, pero después de haber visto esta película definitivamente lo haré. Vayan a verla mientras aún está en el cine!

Por Stefany Báez

Ingeniera en TIC. Soy mAhniática. Grammar Nazi que también se equivoca. Odio las impresoras y ellas me odian a mí.