Una vez más Snapchat nos da una lección de «si no quieres que se sepa, no lo hagas» o por lo menos a tener más cuidado. La semana pasada Snapchat fue víctima de los hackers y más de 13GB de fotos, muchas de las cuales probablemente sean íntimas, fueron filtradas y ahora están circulando en internet.

Snapchat aclaró que el ataque no fue a ellos directamente, y que sus servidores están preparados para resistir estos ataques. Las fotos fueron obtenidas de los servidores de clientes de terceros llamados Snapsave o Snapsaved.com, los cuales tienen la práctica de almacenar las fotos y videos que reciben los usuarios en sus servidores.

A pesar de las muchas veces que Snapchat recomendó no utilizar estos clientes ya que violan los términos de uso comprometiendo la privacidad de los usuarios, aún así seguían utilizándolos y ya vemos los resultados.

Entonces, ¿lección de esto? Si un desarrollador te dice que no utilices un cliente porque compromete tu privacidad, lo ideal sería que les hagas caso.

Por Stefany Báez

Ingeniera en TIC. Soy mAhniática. Grammar Nazi que también se equivoca. Odio las impresoras y ellas me odian a mí.